AGRADECIMIENTO

Surge cuando una persona se siente en deuda con otra porque le ha procurado un bien, le ha prestado un servicio o le ha hecho un regalo. Las personas agradecidas se ponen contentas por los bienes recibidos, los reconocen y están dispuestos a corresponderlos. No se trata de devolver favor con favor sino de sentir y expresar admiración por las calidades humanas de las personas que nos honran con sus acciones.

Entre los bienes que más agradecen las personas se encuentra la vida, la salud, la amistad, la lealtad y las enseñanzas de sus ancestros.

La gratitud y el reconocimiento son los mejores regalos que puede recibir una persona en cualquier época y lugar del mundo.

Para ser agreadecidos…

Admitir que necesitamos a los demás.
Reconocer las obras de otros.
Aceptar que muchas de las cosas buenas que tenemos han sido gracias a lo que otras personas nos han dado: amor, protección, cuidados, talento y sabiduría.

La ingratitud.

Es índice de de soberbia y egoísmo, el que es ingrato se caracteriza porque ignora o pretende ignorar el bien que le hacen los demás. Están tan acostumbrados a tener lo mejor para si que no le es nada fácil reconocer los meritos de los demás.

La ingratitud puede provenir de una especie de mediocridad espiritual, en este caso, aunque no hay mala fé, no deja de ser triste porque produce desconsuelo en aquellos que se esmeran por nosotros sin recibir nunca la más mínima voz de agradecimiento

PALABRAS DE AGRADECIMIENTO.

“Aunque la nobleza vive
De la parte del que da,
el agradecerle está
de parte del que recibe;
y pues ya de dar he sabido,
ya tengo un nombre honroso
el nombre de generoso;
déjame el de agradecido,
pues le puedo conseguir
siendo agradecido cuanto
pues honra tanto dar como recibir”
Pedo Calderón de la Barca.